domingo, diciembre 22, 2013

Me suena para medir



Nos enteramos hoy a través del diario La Nación, que lo menciona a la pasada, de la reciente edición de la obra "Década perdida. Dez anos de PT no poder", del historiador Macro Antonio Villa, en Brasil.


Algunas de las declaraciones del autor a O Globo:
  • "En estos diez años Brasil perdió una oportunidad histórica...".
  • El gobierno "desenterró viejas lecturas económicas, un keynesianismo con olor a naftalina e ideas de presencia del Estado en la economía llenas de telas de araña (...) Probablemente los primeros tres años del gobierno de Dilma estarán entre los peores de la historia económico brasileña y la perspectiva de mejora a corto plazo es baja".
  • "Los éxitos del PT son bien menores de lo que se propala por ahí. (...) Los argumentos del gobierno de que la clase media se volvió la mayoría del país, son totalmente falaces. La clase media no vive en favelas ni gana dos o tres salarios mínimos o menos que eso por mes".
  • "Como historiador, no tengo la culpa de que el volumen de casos de corrupción haya sido el mayor de la historia republicana de Brasil. Nunca antes en la historia de este país hubo tanta corrupción como en la década petista (...). La década petista es la década del discurso, la década de la falacia. No hay realización material. ¿Qué gran obra pública fue construida en estos diez años? ¿Qué usina hidroeléctrica fue construida en estos diez años? Ninguna". 
Para leer en la playa...

6 comentarios:

Carlos dijo...

Mamita, por lo visto el "relato" no es patrimonio solamente de los K... corrupción, afano, cero obra pública... hay un patrón ahí, el patrón de la mentira populista.

Nicolás Tereschuk (Escriba) dijo...

Ay, el amor...

PoliticamenteIncorrecto dijo...

"Intelectuales" y "periodistas" "independientes" que hacen copy paste sin importar país ni lengua.

jfc dijo...

Algunos Carlos son tedibles

Erkekjetter Silenoz dijo...

Ja ja...

El término "petista" me distrae que quiere que le diga......

Politico Aficionado dijo...

No solo en nuestro país paga mas ser un Majul que un Galasso.